No es casualidad que Londres sea una de las mejores ciudades para visitar y reciba millones de turistas cada año. Su red de transporte público es una maravilla. Difícilmente te ocurra que debas llegar a un sitio y no tengas cómo hacerlo.
Tal vez sepas que el Metro tiene el sobrenombre de “Tube” en Londres y que los autobuses rojos de dos pisos no son una atracción turística, sino una forma habitual de transporte pero ¿sabías que los londinenses también viajan en tren, tranvía, barco y hasta teleférico?
Y cuando decimos que «lo hacen los londinenses», podemos incluir también a todos los turistas que visiten la capital de Gran Bretaña y quieran moverse por ella en transporte público como un local. Para ellos, que piensan que la forma de viajar es también parte del encanto del viaje, está pensada esta pequeña guía del transporte público en Londres.
Primero en principal, debemos saber que la ciudad se divide en 9 zonas concéntricas, donde la zona 1 es el centro, sigue la zona 2, … hasta llegar a la zona 9 que sería la más periférica.
Hay que tener en cuenta que la mayoría de las atracciones turísticas de Londres (museos, palacios, catedrales, mercados, …) están en las zonas 1 y 2, dato muy importante a la hora de ahorrar dinero comprando los billetes de transporte, ya que los precios son más altos cuanto más alejada está la zona desde el centro.
Recomendaciones: Oyster Card
Si no tienes tarjeta de crédito o debito contactless, esta es la mejor opción y la más económica para utilizar el transporte público. Esta es una tarjeta magnética recargable que simplifica los pagos en los medios de transporte y resulta mucho más económica que comprar billetes sencillos.
¡OJO! La Oyster Card funciona de forma individual, o sea que se necesita una por cada componente del grupo (los niños menores de 10 años viajan gratis).
Modalidades
El saldo en la tarjeta Oyster puede utilizarse de dos formas: pago por uso (pay as you go) o con abono de transporte (Travelcard). Ambas modalidades se pueden utilizar a la vez en ambas tarjetas. Por ejemplo, se puede tener una Travelcard de zonas 1-2 y a la vez pagar un billete sencillo de zonas 1-6 para llegar al Aeropuerto de Heathrow.
¿Cuál me conviene?
Si el viaje es de 3 días o menos, la mejor opción es recurrir al sistema de pago por uso, dado que el límite diario es el coste que tendría la Travelcard equivalente.
Para estancias de más de 4 días, recomendamos comprar la Travelcard de 7 días, ya que el coste es menor que el de comprar 4 días por separado.
Tarifas de pago por uso
La tarifa Peak (hora punta) se aplica los días de diario entre las 6:30 y las 9:30 horas y entre las 16:00 y las 19:00 horas. La tarifa Off Peak se aplica en el resto de horarios, los festivos y los fines de semana.
Con cada adulto pueden viajar de forma gratuita hasta 4 niños entre 5 y 10 años. No hay límite de niños menores de 4 años.
Los niños de 11 a 15 años con la tarjeta Oyster pagarán un valor menor a un adulto por trayecto en las zonas 1-6.
Tarifas de uso ilimitado
Las tarifas con esta modalidad serían las mismas que las de la Travelcerd equivalente, pero tienes que añadir un extra en concepto de depósito de la tarjeta. Al finalizar el viaje puedes devolverla y recuperar el importe pagado.
¿Dónde se adquiere?
La tarjeta Oyster se puede adquirir en las taquillas de las estaciones de metro y London Overground, en las máquinas expendedoras de Oyster que hay en algunas estaciones y en las taquillas de National Rail. Podéis recargarla en estos mismos lugares y también en los kioscos de prensa.
Retorno de la tarjeta y devolución
La tarjeta puede devolverse en los mismos lugares en los que puede adquirirse. Al devolverla, les deberán reintegrar todo el saldo no consumido y el extra que se paga al adquirir la tarjeta.
Transporte publico
Ahora si, ya sea con el objetivo de visitar interesantes museos, ir de compras a los mejores mercados, llevarse al paladar platos de la cocina más internacional o disfrutar de rincones poco conocidos, estas son las opciones de transporte público en Londres:
Autobús
Los clásicos autobuses rojos de dos pisos siguen presentes en las calles de Londres, aunque la flota se moderniza periódicamente, para servir 700 rutas distintas por la ciudad, de día y de noche.
Otra modernización, muy importante para el viajero, es que los autobuses de Londres no admiten ya el pago en efectivo.
Un viaje cuesta 1,50 £ pero sólo puede pagarse con Tarjeta Oyster, de visitante, Travelcard o tarjeta contactless.
Metro
El Metro de Londres lleva operando desde 1863 y actualmente sus 12 líneas, en forma de mapa, son uno de los recuerdos preferidos por los turistas, impreso en camisetas, tazas o llaveros.
La red de Metro (coloquialmente “Tube”, formalmente “Underground”) de Londres está dividida en 9 zonas, pero la más utilizada y recorrida por los viajeros que hacen turismo es la central, la número 1.
Viajar en Metro es rápido pero no es barato. El billete cuesta 4,90 £ pero hay un considerable ahorro si lo compramos pagando con tarjeta (Oyster, Oyster Visitante, Contactless) que lo deja en sólo 2,40 £
Docklands Light Railway
El DLR o Docklands Light Railway (Tren Ligero) originalmente ofrecía acceso a una zona de incipiente desarrollo de Londres, la zona de los muelles (Docks). La eficacia de estos trenes sin conductor ha llevado a una ampliación de las paradas y aumento de los kilómetros de vías por los que circula, hasta llegar a los 34 km en 7 líneas.
A través del DRL se llega, por ejemplo, a Greenwich y su observatorio o al único servicio público de teleférico de Londres, el Emirates Cable Car.
Las tarifas y formas de pago en el DLR son las mismas que en el Metro.
Barco
Si la ciudad de Londres abraza al Río Támesis casi hasta su desembocadura en el Canal de la Mancha, es inevitable que el transporte fluvial sea una opción perfectamente normal para desplazarse por la ciudad.
MBNA Thames Clippers es la empresa que gestiona el transporte público en los River Bus, los barcos que recorren el Támesis desde Putney en el Oeste a Woolwich en el Este.
Más baratos que un crucero fluvial, aunque uno se pierde el audiocomentario, son una excelente forma de ver algunos de los puntos más emblemáticos de Londres (como el Parlamento, el London Eye o la Torre de Londres) desde una perspectiva original.
Tren
Londres no es sólo el principal eje ferroviario del país sino un ejemplo de distintos servicios y formas de gestionar el transporte por tren. Existen servicios urbanos, interurbanos e incluso internacionales, operados unos por empresas privadas y otros por entidades locales o nacionales.
Al viajar en tren por Londres, aunque se puede pagar con tarjetas tipo Oyster o contactless, no hay descuentos en el precio del billete y el sistema de tarifas se basa en la línea que se use y el horario.
Tranvía
No se imaginen vehículos clásicos porque el tranvía de Londres comenzó a operar sólo en el año 2000.
El transporte público en tranvía en Londres opera en la zona de Croydon y aledaños, al Sur de Londres. No es probable que un visitante ocasional de Londres lo use, salvo que se aloje en esa zona y tenga que desplazarse a alguna de las estaciones de ferrocarril que interconectan con alguna de sus cuatro rutas.
Taxi
Negros y con un estilo clásico que no cambia aunque sí lo haya hecho con el tiempo el modelo de coche, los taxis de Londres son, junto con el autobús rojo de dos pisos, el vehículo más fotografiado de la ciudad.
Usar un taxi para desplazarse tiene un coste mínimo de 2,60 £ de bajada de bandera más el kilometraje, en función de la hora y la distancia. Las tarifas no pueden aumentarse por llevar equipaje o por el número de pasajeros.
Teleférico
A una altura máxima de 90 m, las pequeñas cabinas del Emirates Air Line cruzan el Río Támesis desde Royal Docks a Greenwich Península, ofreciendo unas privilegiadas vistas hacia el Pabellón O2 y Canary Wharf hacia el Oeste y, con buen tiempo, las barreras anti-marea del Tamesis hacia el Este.
El viaje dura unos pausados 10 minutos (aunque en hora punta se reducen a 5 y a partir de las 7 aumentan a 12 o 13 minutos.
Bicicleta
Como la mayoría de las grandes urbes donde hay una gran conciencia ciudadana por cuidar el ambiente, y cuidar la salud, Londres cuenta con un sistema de alquiler público de bicicletas.
El proyecto, impulsado por el entonces alcalde Boris Johnson, de las Bicicletas Santander (Santander Cycles) cuenta con más de 750 zonas de recogida y aparcamiento para las más de 11.000 bicicletas a disposición del público.
Con el único requisito de una tarjeta bancaria y por sólo 2 £ se accede al servicio durante 24 horas y lo más interesante es que los primeros 30 minutos son gratuitos. De esta manera puedes subirte a una bicicleta en una estación y si llegas a tu destino, y la dejas correctamente en su plaza, en menos de 30 minutos no te costará ni un penique.
¡Esperamos que estos consejos les sirvan para su próximo viaje a la ciudad!